Aunque la calle tiene esta denominación, se trataba en realidad del coronel don Rafael Sánchez Paredes, militar profesional que fue nombrado en septiembre de 1936, apenas iniciada la guerra, Comandante Militar de Archena, cargo que mantuvo durante toda la Guerra Civil. Con su nombramiento acabaron los "paseos", saqueos y las importantes alteraciones del orden que tristemente acompañaron el verano del 36.